Cuando publiqué esta receta mi madre aún vivía, poco más de un año después nos dejó, una mañana de abril lluviosa y triste que guardaré siempre en el recuerdo. Todavía no sé vivir sin ella, Te quiero mucho mamá...
Hace unos días leía esto de Rafael Amor, es la clara demostración de que el sentimiento es universal, la misma soledad, la misma ausencia, el mismo vacío inmenso... yo tampoco sé vivir sin ella todavía...
"A veces, en la duermevela de las noches,
siento en mis sienes sus manos como bálsamos.
Un entrecanto suave en su voz de seda,
como un ángel tibio desmayado en mis oídos.
Sobresaltado, me despierto y sentado al borde de la cama,
me siento, como cuando niño la esperaba en el umbral de casa.
La vida quedaba suspendida con su ausencia
y cuando la veía llegar, doblar la esquina,
mi corazón en vilo otra vez latía.
¡Cuánto la quería, cuánto la quiero!
No he aprendido a vivir sin ella todavía."
21/10/2016
Ingredientes:
- 1 lata de sardinas o sardinillas en aceite (unos 85 gr. escurrido)
- 100 gr. de cebolleta o cebolla (la cebolleta es más suave, como sabéis)
- 100 gr. de lechuga (normal, la de toda la vida)
- 2 cucharadas generosas de mayonesa
- una pizca de sal
- rebanadas de pan de chapata o rústico.
Este primer paso es opcional, consiste en quitarle las raspas a las sardinas, yo personalmente creo que lo podéis obviar si son sardinillas (aunque es mejor hacerlo) pero imprescindible si son sardina,la raspa es más dura y puede ser desagradable (tampoco es demasiado trabajo quitarla y el resultado es mucho mejor). Las reservamos en un bol, por supuesto, escurridas.
Limpiamos y troceamos la cebolleta y la colocamos en la trituradora y lavamos, y troceamos la hojas de lechuga
que meteremos, también en el vaso de la trituradora, si no tenemos habrá que cortarlo a mano, que es igual, pero con más currillo, porque tiene quedar muy finito.
Y a triturar..., no os paséis triturando, tiene que notarse la textura
Mezclamos con las sardinillas que teníamos esperando en el bol
Ponemos dos cucharadas de mayonesa y a mezclar. Llegados a este punto el paté está terminado. Probamos y añadimos un poco de sal si fuera necesario, (no suele serlo) y reservamos.
Tostamos el pan en el horno con el grill suave durante 5 minutos sin precalentar a 200º o como lo hagáis habitualmente vosotros. Extendemos la crema sobre el pan y montamos el plato.
Yo lo voy a presentar sobre unas hojas de lechuga y unos tomatitos cherry que tenía por la nevera aliñados con aceite, sal y vinagre.
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