Santiago Ramón y Cajal además de un gran científico fue un creador total, un magnífico escritor, un excelente pintor y un inquieto fotógrafo. En 1901 publicó "Mi infancia y juventud", un libro de memorias en el que nos muestra el Aragón rural de finales del siglo XIX. En este libro, Ramón se retrata a sí mismo: "durante mi niñez fui criatura díscola, excesivamente misteriosa, retraída y antipática".
Como escritor publicó "Cuentos de vacaciones. Narraciones pseudocientíficas",
"Historia de mi labor científica", "Chácharas de café.
Pensamientos anécdotas y confidencias" y "El mundo visto a los 80
años. Impresiones de un arteriosclerótico" que publicó en 1934, muy
poco antes de su muerte en Madrid.
Los dibujos de Cajal no sólo son de extraordinaria importancia por su belleza e indudable valor museístico, sino también porque son copias fidedignas de preparaciones que muestran la microorganización del sistema nervioso, esta pasión le llevaría a la fotografía, y en 1912 publicó "La fotografía de los colores. Bases científicas y
reglas prácticas" y siempre estuvo investigando en nuevas formas de
fijar las imágenes tanto en el negativo como en el papel.
Yo-Yo Ma, de padres de origen chino, nació en París en 1955 y comenzó a tocar en público con solamente cinco años. En 1962 su familia se trasladó a Nueva York, donde vivió la mayor parte de sus años de formación. Sus grabaciones de las Suites para violonchelo solo de Johann Sebastian Bach han sido especialmente aclamadas. Hoy os propongo el preludio de una de ellas.
Receta:
Esta es una de esas recetas básicas que sorprenden, que son muy fáciles de hacer y que siempre salen bien.
Ingredientes:
- 1 huevo L o M grandecito
- 150 gr. de almendra molida
- 125 gr. de azúcar
- 24 gr. de azúcar avainillado
- ralladura de medio limón
- 1 cucharada de agua de azahar
- almedra picada y/o en láminas para decorar
Rallamos el medio limón
En un bol grande ponemos el huevo
Batimos ligeramente y añadimos el azúcar y el azúcar avainillado
La ralladura del medio limón
y la cucharada de agua de azahar
y la almendra molida
y mezclamos todo bien hasta obtener una pasta homogénea, aunque yo empecé a mezclar con las varillas, a veces es mejor con una espátula o una cuchara
Reservamos en el frigorífico mientras preparamos el horno
Precalentamos el horno a 180º calor arriba y abajo. En la bandeja formamos las galletas (yo las hago de unos 17 gr. cada una) sobre un papel de horno para que no se peguen.
Decoramos con la almendra molida, la almendra en láminas o ambas ...
Y horneamos durante unos 8 ó 10 minutos, dependiendo de el horno de cada uno, de los grande que las hayamos hecho y de lo tostadas que nos gusten, es bueno vigilarlas para que no se tuesten demasiado
Para terminar las sacamos, esperamos que se atemperen un poco y las colocamos en una rejilla para que se oreen
Dejamos que se enfríen y listas, a disfrutar.